Recordando los hechos
En 1648 la epidemia de fiebre amarilla azota a Yucatán, son agotados los recursos médicos y científicos de la época y se implora la intervención divina, el ayuntamiento de Mérida en reunión extraordinaria, acuerda que sea traída la virgen de Izamal para que interceda por todos los yucatecos y prodigara salud.
El pueblo de Izamal no estaba de acuerdo en dejar salir a su patrona, pero después de un acuerdo se permitió su ausencia por 17 días, considerado como el primer viaje célebre de peregrinación de la virgen, fue una de las fiestas populares más grande del momento, todo el tiempo estuvo acompañada de coros, música, rezos, canticos y apretadas filas de devotos con candelas encendidas de cera de brillantes luces que dejaban llegar al cielo sus plegarias, la epidemia cesa dos años después, y como agradecimiento se construyen el camarín mariano detrás del ábside de la iglesia conventual de Izamal como testimonio de la gratitud de los yucatecos por la intercesión divina en tan grave adversidad.
Esta vela de cera natural conmemora ese primer viaje de peregrinación entre ofrendas de rosas y el relajante aroma del agua de azahar.
Peso / Dimensiones
190 grs / 6.7 cm de alto por 5.5 cm de diámetro
Tiempo de Combustión
18 horas aprox.
Pirámide Olfativa
Notas de cabeza: Rosas de damasco
Notas de corazón: Rosas de Castilla
Notas de fondo: Flor de Azahar
VELA IZAMAL 1648
Bajo la luz de las velas y ofrendas de fe, los arcaicos muros de piedra, que cobijan la sombra del camarín de nuestra señora de Izamal, dejan salir esta fragancia clásica de rosas y flores frescas de azahar. Narran la primera travesía de la virgen por los largos caminos de Yucatán hasta la capital provincial, llevando auxilio y paz a los hombres de fe en tiempos de Don Esteban de Azcárraga.